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DARK FUNERAL en Santiago: El Diablo está adentro
La tarde del sábado 15 de marzo difícilmente será olvidada por los más de 500 espectadores que llegaron paulatinamente al Teatro Cariola para presenciar un ritual intenso basado en las artes negras del black metal.
NECRODEMON
Temprano y con muy poca gente en el teatro, bajo previas canciones de KISS, BLACK SABBATH, entre otros, las luces se apagan, se escuchan aplausos y algunos gritos de apoyo, y NECRODEMON ingresa al escenario con una introducción musical. Luego, el vocalista se presenta vestido en cuero y luciendo un atuendo muy costumbrista de color negro, saludando a la audiencia para dar inicio a este ritual.
El vocalista da inicio al primer tema, Spiral of Madness, provocando automáticamente que la poca gente presente en el teatro genere un ambiente auspicioso y caótico de maldad. Si bien el sonido no es óptimo y en varias oportunidades se dan indicaciones de mejora, los cambios realizados hacen estragos, lo que se manifiesta a través de la voz del vocalista a lo largo de la canción.
Con Burn the Christian Burn, segundo tema presentado en vivo, la temática se torna más rápida y a la vez intensa, siempre cuidando los cambios de frecuencia que pasan de un extremo a otro de forma armónica y sincrónica. El público, que incrementa con el tiempo, comienza a disfrutar con esta canción.
The Return es el tercer corte que se toma el escenario y, al contener matices old school death metal, genera una rápida conexión con la audiencia, que comienza a participar con los característicos hey hey de la noche.
In the Ecstasy of Fire, cuarto track interpretado, presenta más características de death metal melódico y a la vez es más uptempo, intentando rápidamente mantener la energía y participación obtenida con el tema anterior. La canción posee un misticismo maléfico que conecta sin problema con el público, que sigue entrando al teatro.
El quinto tema, Heaven’s Disdain, comienza con una trayectoria melódica que presenta un sello distintivo de la banda y que ahora es más evidente, calzando con todos los temas previos. El sonido se intensifica durante el transcurso de la canción y su profundidad entrega una energía proveniente de un abismo oscuro, presentando una caótica visión infernal.
Con The Lost Kind of Magic, sexto tema presentado, se genera un death metal melódico que produce una insanidad total. Sin embargo, la audiencia solicita los temas clásicos mientras disfruta la intensidad de este corte.
El séptimo tema, Through Infinite Grief, proviene del último disco que están promocionando. Se intenta fervientemente darlo a conocer y demostrar que la banda tiene trayectoria y que, además, la calidad, innovación e inspiración siguen intactas a través de los años.
La octava y última canción marca la despedida de NECRODEMON del escenario. La banda agradece en múltiples ocasiones la recepción de la audiencia, a la productora y la oportunidad de tocar en este increíble festival. Y para hacerlo, utilizan su super hit Que Muera el Perro Jesús (QMEPJ), desatando la locura en la audiencia que comienza a asistir en masa. La canción es un éxito, la banda lo sabe, y realizan todo lo posible para que esta performance quede en la retina de los espectadores.
Una propuesta innovadora que vaticina un gran inicio de lo que vendrá después en este festival, que comienza con la apertura del pacto con NECRODEMON.
A CANOROUS QUINTET
La segunda banda clásica de death metal melódico de Suecia ya se había presentado debutando en Warehouse hace unos días atrás. Sin embargo, fueron muy pocos los asistentes a ese debut y, como la audiencia era mayoritariamente para DARK FUNERAL, esta presentación podría considerarse como un verdadero estreno ante el público chileno.
La presentación comenzó con una introducción y el tema The Last Journey, que presagia de alguna forma lo que va a suceder, con matices melódicos de tendencia reflexiva.
In the Twilight of Fear demuestra una forma sofisticada de hacer death metal melódico, con una voz estridente y demoledora que a veces resulta muy agresiva, mientras que en otros momentos armoniza a la perfección con la batería y los matices característicos del género. El público, sorprendido, estalla en aplausos.
Luego es el turno de Spellbound, más rápida y agresiva, que hace vibrar a la audiencia de inmediato. La secuencia exhibe de gran manera las habilidades vocales del frontman, quien se desplaza de un lado a otro del escenario. En esta ocasión, es la brutalidad la que toma protagonismo sobre lo melódico, y el público lo agradece con los característicos ¡Hey! made in Chile.
Con Retaliation, la banda invita al mosh, y la temperatura sube. El nivel de participación aumenta considerablemente, con elementos y directrices claras que reflejan lo que la banda quiere demostrar: una agresividad melódica bien lograda. En algunos momentos, la voz del vocalista suena tan poderosa que tiende a opacar el resto de la música.
En Realm of Rain, la banda exclama: ¡Fucking amazing, Santiago! Rápidamente comienzan a dominar a la audiencia, desplegando un sonido death metal old school que desata la euforia. A estas alturas, el grupo ya impone los términos de su estilo, combinando su potencia con melodías de guitarras que han tenido un desempeño notable y pulcro.
The Complete Emptiness es rápida, pesada y entrega un exceso de riffs que se acoplan con la batería de manera melódica y contagiosa. Un tema que eleva el nivel técnico del show.
Con The Black Spiral, la banda agradece múltiples veces el recibimiento del público. Los asistentes, ya completamente entregados, responden con aplausos y gritos que no cesan.
En Embryo of Lies, los constantes agradecimientos vuelven a escucharse con un entusiasta ¡Amazing, Santiago! Este tema marca un cambio interesante: una especie de balada melódica de death metal, que en algunos momentos recuerda a obras maestras como Trapped in the Corner y The Philosopher. Llama la atención por ser extremadamente digerible al oído y con potencial para alcanzar el mainstream en plataformas como Spotify.
Naked with Open Eyes sorprende con un quiebre inesperado, ya que la voz del frontman combina elementos guturales del death metal con una interpretación melódica estridente. Esta mezcla resulta en un tema brutal, agresivo y rápido, generando una gran reacción del público.
Land of the Lost se distingue por su dirección rítmica bien ejecutada, con cambios entre secciones lentas y explosiones más frenéticas que generan un buen balance dinámico en el show.
Silence of the World Beyond mantiene la misma línea del tema anterior, con variaciones entre pasajes melódicos lentos y trazados más veloces. Esta canción permite hacer una retrospectiva de todo lo que ha sido la presentación de la banda, resaltando su riqueza en estructuras y matices.
Para el final, la banda se guarda su joya: Orchids Sleep. Según ellos mismos comentan, es su canción favorita, y también su regalo final para el público chileno. Con más de seis minutos de duración, este tema es un despliegue de técnica y melodía, donde cada fragmento funciona como una orquídea geométrica, con pétalos sonoros que poseen distintas características dentro del death metal melódico. Una pieza monumental para cerrar la noche con un impacto duradero, dejando en el público la inquietud de buscar más sobre la banda y analizar su música con mayor detención.
El show terminó entre una gran ovación y múltiples reconocimientos, consolidando a A CANOROUS QUINTET como una de las bandas más impresionantes de la noche. Sin duda, ganaron nuevos seguidores y dejaron su huella en este festival. Mientras tanto, la audiencia comenzaba a prepararse para el plato fuerte de la jornada.
DARK FUNERAL
Let the devil in and you’ll see what it will do to you. Las cosas se tornan oscuras y el pacto comienza. Existe un ambiente ensombrecido y brutal que presagia un antes y un después. Un portal maligno comienza a abrirse. Todo está listo, algunas directrices se establecen: todo permitido, menos el flash, lo que causa algunas risas entre la audiencia.
Comienza la intro y la puesta en escena es electrizante, fascinante y magnética. Se entiende que las cosas serán diferentes, que DARK FUNERAL debe cumplir su objetivo.
Nosferatu, canción del año 2022, abre los fuegos. Si bien el tema es relativamente nuevo, solo parte de la audiencia lo canta y lo considera un clásico. Es rápido, agresivo y fácilmente se puede relacionar con el film. Algo maravilloso que destacar es la actitud del vocalista, quien mira hacia el cielo del teatro y hace una especie de oración antes de cantar las estrofas, repitiéndolo constantemente. Es como si las instrucciones llegaran directamente del cielo, pero en sentido inverso.
Autrum Regina es perfecta como segundo tema: fría, demoledora, siniestra y mágica, un sueño diabólico hecho realidad. Nada está al azar y deja al Teatro Cariola completamente hipnotizado. Excelente apuesta.
To Carve Another Wound es una perfecta continuación, pavimentando el camino de Autrum Regina con mayor intensidad y dejando que la energía fluya nuevamente hacia un estado intermedio de maldad. El público no para de gritar y grabar esta puesta en escena de manera constante. Los guitarristas comienzan a ser parte crucial del espectáculo, lo que genera una atmósfera aún más oscura.
The Arrival of Satan’s Empire encuentra el terreno ideal con la intensidad dejada por el tema anterior. Esta bestialidad definitivamente marca un punto de locura e insanidad en el show. La brutalidad es absoluta, la audiencia lo sabe y nada queda al azar. Se llega al primer peak del concierto. ¡Hail Satan, rule! ¡El Teatro Cariola se viene abajo con esta blasfemia!
When I’m Gone es un tema más lento, que en cierto modo baja la intensidad alcanzada con el peak del tema anterior. Quizás se busca reorientar a la audiencia con una pieza más digerible y fácil de cantar, gracias a su coro característico y pegajoso.
As One We Shall Conquer nos devuelve a la intensidad de Satan’s Empire y provoca nuevamente la efervescencia del Teatro Cariola. Rápida, punzante y feroz, esta canción es una entrega total al demonio si no estás 100% sumergido en el black metal void.
Unchain My Soul sigue acercando a la audiencia a las puertas del infierno. La atmósfera está completamente desatada bajo este hechizo, pero aún falta más para romper las puertas del umbral.
Open the Gates lo destruye todo. ¡Qué tema más increíble! Llega el segundo peak con esta canción, y la fuerza que genera es brutal. Ya no hay tiempo para grabar, porque las puertas del infierno se han abierto definitivamente.
Shadows Over Transylvania eleva la intensidad del concierto a niveles descomunales. La audiencia responde sin tregua, sin tiempo para pensar, solo para disfrutar la maldad que este tema desata.
My Dark Desires marca el tercer peak del espectáculo. Un temazo que la gente canta y grita con devoción. Solo debes seguir sus riffs, y rápidamente esta canción se apodera de tu mente. El concierto mantiene todo el poder necesario para que el portal siga abierto desde las profundidades del infierno.
In the Sign of the Horns sigue la senda del tema anterior, aunque con una ligera disminución en la intensidad. Se agradece esta breve pausa de insanidad y maldad absoluta, permitiendo apreciar con mayor detalle el tecnicismo de DARK FUNERAL.
Let the Devil In llega para preparar el camino final del concierto, exudando todas las cualidades por las que el black metal causa estragos. Los aplausos y gritos no paran.
Where Shadows Forever Reign es, sin duda, el super clásico más esperado de la noche. ¿Dónde están los fallen angels? Nadie lo sabe, pero esta canción nos indica exactamente dónde podrían estar. Majestuosa, oscura, malvada, intrigante, pulcra y ejecutada a la perfección. Un clásico indiscutido que merece estar en cualquier playlist de black metal. Su ejecución marcó el cuarto peak del show.
El encuentro con lo desconocido ha terminado. El portal se cerró tan rápido como se abrió. Fue maligno. Fue perfecto. Una gran noche con verdadero black metal, directo desde las puertas del averno.
We let the devil in and look what it made us do. ¡Hail Satan!
Review: Daniel Navas
Fotografías: Rubén Garata (@brutal_pebre_)